David Hernández Palmar: “Uno de los desafíos del cine indígena tiene que ver con que nuestra voz sea parte de la gran conversación en la toma de decisiones”

David Hernández Palmar nació en Maracaibo, vivió su infancia en la comunidad indígena Guayasirú del pueblo Wayuú en La Guajira venezolana, en una familia de clase trabajadora, de la que recuerda afecto y protección, tardes de pastoreo de chivos y búsqueda de agua al jagüey: “Recuerdo muy marcadamente algunos atardeceres, la fuerza de la lluvia […]

David Hernández Palmar nació en Maracaibo, vivió su infancia en la comunidad indígena Guayasirú del pueblo Wayuú en La Guajira venezolana, en una familia de clase trabajadora, de la que recuerda afecto y protección, tardes de pastoreo de chivos y búsqueda de agua al jagüey: “Recuerdo muy marcadamente algunos atardeceres, la fuerza de la lluvia y viento como sonaban, pero sobre todo la felicidad que siempre me dio ir al mar”. Es co-fundador de la Muestra de Cine Indígena de Venezuela y coordinador del Programa de Profesionalización para Cineastas Emergentes

Tejidos de Dignidad. Nos llama la atención que al buscar por internet quién es David Hernández Palmar aparece en wikipedia una reseña exclusivamente en idioma indígena, en wayuunaiki. ¿Conoces quién la elaboró? ¿Participaste de esa iniciativa? ¿Qué opinión te merece?

DHP. Esa iniciativa la lleva Neyma Paz, ella es hija de Ramón Paz Ipuana que es un escritor wayuu muy prominente, es el que este sentó bases para lo que es la oralitura del pueblo wayú. Así mismo también, en términos narrativos, es una referencia para muchos de los que estamos haciendo cine hoy día, lo que entendemos un acercamiento al futurismo indígena en términos de la estética, lo que ha escrito. Por ejemplo, “La capa del morrocoy” es una de las obras de Ramón Paz Ipuana que es el papá de Neyma Paz, quien a su vez es quien ha hecho esta iniciativa de comenzar a escribir en wayunaiiki los perfiles de personas wayuu que estén en el radar de ella y que consideren de poder hacer un perfil. Es un trabajo muy lindo que siento, también, da una clave de cómo empezar a reclamar espacios dentro del tema digital y el uso de la tecnología.

Tejidos de Dignidad. ¿Cómo llegaste al cine? ¿Por qué decidiste dedicarte a la comunicación y al cine? ¿Cómo te formaste?

DHP. Bueno yo creo que mi llegada al cine tiene que ver también con esas revistas de geomundo que son parecidas a las de National Geographics que mi abuelo y mi abuela tenía en su biblioteca allá en La Guajira, y siempre había las publicidades de las cámaras y siempre tuve curiosidad de cómo es que un aparato así como éste podía capturar una imagen. Entonces, era la noción que yo tenía de poder mirar, de poder este mirar esos equipos, entonces siempre estuve obsesionado con cámaras desde pequeño.

Luego, después de grande, mi mamá como maestra de aula, es una de las personas que ayudo mucho en las políticas públicas en Venezuela -entre otras personas- para poder proponer el derecho de cada pueblo a decidir cuál va a ser su malla curricular o las cosas que necesitan para hacer en términos de educación. Y mi mamá me invitó a poder acompañarla haciendo fotos de los procesos, visitando otras comunidades, documentar como testimonio de gestión pública, hacer fotos para acompañar toda la iniciativa que se estaba haciendo.

Luego, entró a estudiar comunicación social que era como lo más parecido en términos de acceder a la herramienta audiovisual. Igual la universidad formaba como en algo más televisivo, más como de reportaje y, sin embargo, también estudié fotografía. Entonces, tenía como el referente de tomar fotos para sostener la palabra, el estudiar fotografía como para entender la base del cine y lo audiovisual también entendiéndolo como hacer periodismo.

También, mi tesis cuando la realicé revisé un poco cuáles son o cómo entiende el pueblo wayuu del Socuy, que resiste la minería, cómo entiende la calidad de vida, desde las propias formas de entender, qué es eso de una calidad de vida, con acceso a agua, con poder sembrar, tener acceso a alimentos. Si bien el concepto de calidad de vida es una construcción bien relativa y bien sesgada, tal vez, desde Occidente, pero bajo esa clave también qué es lo que proponen los pueblos, finalmente desde la certeza, la cosmovisión del Buen Vivir.

En términos políticos respecto al cine, yo agradezco mucho la oportunidad que tuve en la Cinemática Nacional de Venezuela, cuando se hizo la red de Cine Comunitario en Venezuela. También fue la Cinemática la que nos apoyó, a mí, a Yanilú y a Leiqui, para poder hacer la primera versión de la Muestra Internacional de Cine Indígena de Venezuela, y ha sido nuestra base política también de entender el retorno de la imagen hacia los territorios. La misma experiencia de la Maestra Internacional de Cine Indígena fue la que dio origen a nuestra Muestra de Cine y Video Wayuu, que es una apuesta del pueblo wayuu, entendiéndolo desde la realidad binacional, transfronteriza o fronteriza, como lo quieran llamar, pero es una apuesta territorial que nos ha permitido tener conversaciones con respecto a cómo ponernos de acuerdo en cuanto a educación y salud, ésto viene a ser como una de las conversaciones con respecto a la comunicación. Cosa que también sembró mucho Farías Montiel en vida que tenía que ver con la soberanía visual de los contenidos en la frontera.

Lo demás ha sido de la curiosidad propia de entender cómo otros pueblos han podido reclamar la autorepresentación de sus procesos políticos y también desde una cinematografía, entonces eso forma parte de mi formación política y la aproximación al cine.

Tejidos de Dignidad. ¿Cuáles han sido las producciones en las que has trabajado, cuál ha sido tu rol y cuáles son sus temáticas?

DHP. He participado en muchas producciones, por ejemplo, una de las más significativas que fue como al principio de cuando empecé a hacer documentales fue “Dueños del agua” que codirigí con un hermano indígena de Brasil del pueblo Xavante, y con Laura Graham una amiga antropóloga. Entonces, fue una colaboración sobre cómo entender una coproducción entre Estados Unidos, Brasil, Colombia y Venezuela, en este caso, por el pueblo wayuu.

También he sido director, he producido muchas obras en coproducción, en producción asociada. En plena pandemia grabé, un cortometraje con mi mamá, la primera vez donde escribía y también hacía ficción y fue muy lindo, la experiencia de co-crear con mi mamá y también con Flor Palmar, y también mirar qué posibilidades tiene el cine en cuanto a que uno puede recordar memorias de la niñez, y cómo eso pueden ser metáforas para poder hablar sobre la reciprocidad. Entonces, es un corto que se llama “Historias de mi madre o Relatos de mi madre”, tiene que ver con eso, si bien no existe una palabra que defina reciprocidad, sí hay hechos que uno puede citar que se parece a la construcción o la definición sobre qué es reciprocidad. En el caso wayuu es podernos visitar largas distancias para demostrar a otra persona que a uno le importa un familiar, un hermano, una hermana, etc.

Tejidos de Dignidad. ¿Cuáles consideras que son las particularidades de hacer cine indígena?

DHP. Yo creo que las particularidades de hacer cine indígena tienen que ver con lo siguiente: Uno, con el hecho de que tenemos como pueblo un derecho de relacionarnos con otros pueblos, y creo que la cinematografía es uno de esos espacios en los cuales podemos relacionarnos. Si bien cine indígena es una categoría que discutimos con lo blanco mestizo, la sociedad no indígena, tiene que ver con que existe el cine como un hecho concreto de contar historias, imágenes en movimiento y sonido, pero que tiene también su identidad, en términos de por ejemplo cine tzotzil, cine wayuu, cine mapuche, cine yukpa, etc. Pero que, finalmente, también creo que las particulares de hacer cine indígena tiene que ver con que, cuando nos reconocemos como pueblo, podemos poner en crisis la metáfora del dinero, que podemos hacer trueque para poder finalizar una peli, poniendo la palabra de alguien, alguien coloca una cámara, gestiona dinero para el seguro, o de pronto el color, el sonido. Entonces, digamos, esas son las particulares que tienen que ver con hacer cine indígena.

SÜKÜJALA TEI por David Hernández

Tejidos de Dignidad. ¿Quiénes apoyan la realización de producciones indígenas en América Latina? ¿Cómo son los circuitos de distribución de estas obras?

DHP. En América Latina, el apoyo hacia la relación de producciones indígenas, digamos en los últimos 10 años, han cobrado vitalidad en ciertas convocatorias de algunas instituciones fílmicas, y tiene que ver con que las narrativas o el trabajo de los curadores europeos ha visto que se cuenta la misma historia desde Occidente, distinto dinero, distintos idiomas, pero casi siempre se cuenta la misma historia. Entonces han visto una oportunidad en el cine de los pueblos, de poder empezar a programar esta cinematografía que tiene muchos años, no solamente de hacer, sino también en reclamar sus espacios propios en proporción a la justicia que merecen nuestras historias.

Entonces yo creo que muchas de las convocatorias hoy día tienen que ver con unos momentos históricos, con el reconocimiento que hace el cine a la cinematografía mundial. Y por ahí la responsabilidad como pueblos de poder criticar y también de tener mucho cuidado cuando llegan personas diciendo que quieren colaborar o coproducir, porque tampoco es que la tienen clara con respecto a cómo hacer cine con las comunidades indígenas. Porque hay veces que hay derechos económicos más reconocidos para un chef en comparación con una cocinera en territorio, entonces es ahí donde ponemos en discusión o debatimos o criticamos estas prácticas que tiene el cine, que es patriarcal, que es vertical y que tiene mucho que ver en cómo se usó esta herramienta de contarnos para deformar el decoro de los pueblos.

Entonces, creo que la autorepresentación es muy importante, sostenerla frente a estas convocatorias que están saliendo, como por ejemplo La Cámpara, Mesoamérica o, en el caso de Colombia, el FDC (Fondo para el Desarrollo Cinematográfico). También, convocatorias a nivel internacional que apoyan a ciertos países en América Latina y el Caribe, que es para etapas de desarrollo que es cuando más cuesta, cómo arranco yo mi historia. Creo que hay varias instituciones que sí están buscando el apoyo y hay personas claves dentro de esas instituciones también que tienen la sensibilidad de, al menos, poder armonizar un poco la necesidad o la demanda que tienen los pueblos en cuanto al acceso al dinero. No quiere decir que está resuelto todo, se necesita un presupuesto vigoroso, eso con respecto a cómo es el apoyo a esa realización de producciones indígenas de América Latina

En cuanto al circuito de distribución o difusión de estas obras los circuitos de difusión o diseminación o exhibición de estas obras, hay varios: la misma Muestra en Venezuela, La Musigüa o Ficwallmapu en Chile-Argentina digamos; también está Daupará en Colombia, así como hay otras muestras también organizadas por pueblos indígenas.

Tejidos de Dignidad. ¿Qué desafíos enfrentan los cineastas indígenas hoy en día?

DHP. Yo creo que los desafíos que enfrentan los cineastas indígenas hoy en día tienen que ver: Uno, con el catálogo de derechos básicos que tienen cualquier persona. Tiene que ver con que a veces se nos exigen cierta calidad estética occidental, cuando realmente hay cuestiones en los territorios que tienen que ver con derechos básicos de acceso a la salud, la educación, de tener agua, que el agua esté disponible o un agua sana para poder tomar.

Entonces, creo que también es necesario cómo empezar a mirar, desde una mirada más profunda, qué desafíos son, pero creo que los desafíos tienen que ver con que sean escuchadas las demandas y que nuestra voz sean parte de la gran conversación en términos de la toma de decisiones para fondos, para el fomento del cine indígena o el cine hecho por indígenas, porque también los indígenas tenemos el derecho a mirar otras cosas que no solamente sea nuestra propia comunidad. Creo que, también, los indígenas podemos empezar a hacer metáforas de cómo nos sentimos fuera del territorio o empezar a tocar otros temas como, por ejemplo, el machismo, otro tipo de cosas que están dentro y fuera del territorio.

Tejidos de Dignidad. ¿Nos puedes contar sobre el Programa de Profesionalización para cineastas emergentes? ¿Cómo se creó, quiénes pueden participar y de qué manera?

DHP. Es una idea que sale, sobre todo en momentos de pandemia, cuando los pueblos fueron ratificados desde la propia narrativa, y que nuestro punto era que volver a la raíz no es atraso o volver a la raíz no es empobrecimiento, algo paupérrimo, sino más bien plantear otra relación con la madre tierra, pero sobre todo romper esa noción de que la naturaleza y los seres humanos estamos aparte. Entonces, se crea el programa de profesionalización para cineastas emergentes, precisamente, para poder visibilizar las narrativas que se construyen desde bosques tropicales para combatir la crisis climática. De eso se trata ese programa.

En el caso de quienes participan, participan personas en tres grupos lingüísticos occidentales: castellano inglés y portugués, y de allí esos idiomas que pueden ser segundos o terceros idiomas de muchos pueblos dan una diversidad de al menos unas 46 personas en el año uno, dos, tres, porque estamos en el tercer año de la mentoría de este programa de profesionalización para cineasta emergentes. Quienes han podido hacer cambios con sus cortos o largos en políticas públicas, pero también visibilizar una campaña, parar algún tipo de minería o algún tipo de extractivismo dentro de sus territorios. Pueden participar las personas quienes tengan historias, ya se han hecho convocatorias abiertas y también por invitación según las organizaciones que están.

En el caso de Venezuela está Kuyu Saúl López, que es uno de nuestros mentis, él es del pueblo yekuana y es una de las personas claves en referencia a cómo se trabaja con la niñez indígena y la animación.

Tejidos de Dignidad. ¿Qué quisieras que sucediera en Venezuela en relación a la producción y el consumo de cine indígena?

DHP. En Venezuela creo que hay que seguir fortaleciendo las personas que todavía permanecen en territorio, casos Kuyu, como Awki Quilema en Mérida del pueblo quechua, y otros otras personas, hermanos y hermanas que están en las fronteras. Tiene que ver con seguir reconociéndonos, identificando la posibilidad de fortalecer o completar los trabajos. No necesariamente los pueblos indígenas formamos parte de esa narrativa occidental de la diáspora que tienen otra agenda o, tal vez digamos, no hay una conversación específica para los indígenas, sencillamente no nos sentimos identificados con eso. Lo que quisiera que sucediera en Venezuela es que la gente pueda disfrutar otra versión más de la Muestra Internacional de Cine Indígena de Venezuela. En cuanto a la producción, que haya más posibilidades de que indígenas como Kuyu, y otros hermanos y hermanas, puedan tener un estreno en distintas comunidades.

Entonces, mi invitación sería a que sigamos contándonos y agradecer mucho a Tejidos de Dignidad por esta oportunidad de también reunirnos a muchas personas que estamos desde nuestras capacidades en la colectividad de poder seguir fortaleciendo el cine indígena.

Leiqui Uriana: “Me siento orgullosa de haber sido inspiración y haber transmitido conocimientos y pasión por el cine a otros hermanos wayuu”

Desde hace 15 años, Leiqui Uriana vive en Maicao, La Guajira colombiana. Es hija del pueblo Wayúu, nació en Maracaibo y es cineasta desde hace 20 años. Leiqui decidió serlo porque tenía la necesidad de mostrar la cultura y las realidades de su pueblo y sobre todo, de las mujeres wayuu desde una mirada no […]

Desde hace 15 años, Leiqui Uriana vive en Maicao, La Guajira colombiana. Es hija del pueblo Wayúu, nació en Maracaibo y es cineasta desde hace 20 años. Leiqui decidió serlo porque tenía la necesidad de mostrar la cultura y las realidades de su pueblo y sobre todo, de las mujeres wayuu desde una mirada no estereotipada. Está por estrenarse en festivales su nuevo corto documental que dirigió “Memoria de la Avispa”. 

Leiqui tuvo la amabilidad de concedernos una entrevista. Conoce más sobre ella, su mirada y su trabajo en la promoción de la formación y realización cinematográfica desde los pueblos indígenas.

Tejidos de Dignidad. ¿Por qué decidiste hacer cine? ¿Qué significa para tí ser cineasta indígena?

Leiqui Uriana. Decidí hacer cine porque desde que conocí la posibilidad de hacer películas me puse a investigar qué se había hecho sobre el pueblo Wayúu y encontré películas que denigraba el rol de la mujer Wayúu, la cultura era completamente estereotipada y sentí la necesidad de contar nuestras historias y nuestras realidades desde una visión propia.

Además, vivía en la ciudad de Maracaibo y a pesar que gran parte de la población era indígena Wayúu existían grandes brechas entre ambas culturas, llenas de prejuicios y sub valores de las mismas, por lo que pensaba en ese momento que con el cine se podían unificar y hacer entender las culturas para una mejor convivencia en un territorio como lo era Maracaibo.

Tejidos de Dignidad. ¿Cuáles han sido los temas de tus producciones? ¿Puedes detallarnos en cuáles producciones has participado y cuál ha sido tu rol? ¿En qué proyecto estás trabajando ahora?

Leiqui Uriana. Los temas de mis producciones han sido variados, siempre con la intención de unificar corazones para el entendimiento y la convivencia. Como directora de documentales me ha interesado plasmar las historias contemporáneas en las que vive el pueblo Wayúu, la resistencia cultural a pesar de los contextos citadinos en los que se encuentra.

En mis roles de producción he realizado varios proyectos, tanto documentales como ficción. Todas películas hechas con las comunidades Wayúu En este momento estoy realizando varios proyectos:

Tengo una empresa colombiana que hace producción audiovisual y con la empresa tenemos un proyecto de largo documental que es ganadora de co-producción de Ibermedia, se llama el “Ocaso de la Amazonía”. Es una película peruana que también será rodada en Colombia este 2024. Producida por el cineasta indígena Diego Sarmiento.

También somos productora delegada en la película documental “Buscando las marcas del Asho’oshi” (el tatuaje wayuu) de los cineastas indígenas David Hernandez Palmar y Marbel Vanegas Jusayuu. Co-produzco con Jona Luna. Esta película está en su última etapa de rodaje a finales del 2024.

Recién este año inició el proceso de producción general de las películas de la cineasta indígena wayuu Luzbeidy Monterrosa. El largo de ficción «La danza del perdón» y el largo documental «Akoyolowaa – cubrirse el alma» ambos en proceso de desarrollo.

Ahora como directora: Luego de 10 años de haber dirigido vuelvo a hacerlo y me estreno con un corto documental que se llama «Memoria de la Avispa» que trata sobre el encierro de mi abuela y mío en el marco de la pandemia y como los encierros sirven para reflexionarnos y salvaguardar la vida, por lo que aprovechamos para hablar sobre nuestro encierro cuando éramos niñas y como esté nos marcan la vida. 

Este corto luego de muchas reflexiones y resistencia por fin inicia su proceso de recorrido por festivales de cine en este 2024. Este es el trailer https://youtu.be/fiPnqS2Odww. Es una película colombiana, porque como Wayúu tengo la doble nacionalidad y desde que vivo en Colombia aplico a los fondos como colombiana.

TRAILER Memoria de la Avispa – Leiqui Uriana

Estoy en el desarrollo de otro cortometraje que se llama “Médico, por la gracia de los espíritus”. Es un corto que está en desarrollo.

Luego de mi salida de la Escuela de Cine de San Antonio de los Baños (Cuba), no sabía qué hacer. Mucha gente tenía muchas expectativas de lo que iba a realizar. Por lo que me llené de miedos e inseguridades y quise que otros indígenas pudieran tener la oportunidad de contar sus historias, entendí que el cine no es objetivo, es muy subjetivo y que está lleno de las experiencias propias. Iniciamos con talleres de formación audiovisual con la cineasta Yanilú Ojeda en Maracaibo y con otros pueblos indígenas a nivel nacional.

Luego de eso me encontré con mis hermanos wayuu en la frontera en donde se estaba gestando la idea de la Escuela de Comunicaciones Wayúu, me uní a ese proceso y con ellos pasamos 5 años formando a jóvenes Wayúu tanto colombianos como venezolanos en las comunicaciones desde un sentido cultural, espiritual y con sentido propio que pudieran contar sus historias desde su ser wayuu.

Esa experiencia logró que varios jóvenes Wayúu  hoy sean realizadores, cineastas y productores. Ejemplo de ello es Marbel Vanegas Jusayu, Luzbeidy Monterrosa, Angel González, Yelver Florez, Lismari Machado y Eduvilia Uriana por mencionar algunos.

En estos 10 años de inactividad como directora me siento orgullosa de haber sido inspiración y haber transmitido conocimientos y pasión por el cine a otros hermanos wayuu que desde sus vivencias han podido reflejar películas poderosas.

Mi sueño es tener un grupo indígena para realizar nuestras películas, con quienes podamos hablar en nuestro idioma, que entienda nuestra cultura y nuestros procesos espirituales. Esto casi lo logro con la película de la Memoria de la Avispa, las cabezas de equipo son Wayúu. Nos falta un poquito más y esto se logra.

Tejidos de Dignidad. ¿Cómo fue la experiencia de formación en la Escuela de cine de San Antonio de los Baños? ¿Cursaste con otros estudiantes indígenas? ¿Cuál es tu recuerdo más impactante de ese proceso?  

Leiqui Uriana. Cursé el curso regular de 3 años. No cursé con otros estudiantes indígenas, pero en otro curso solo había otro hermano indígena de Panamá.

Tuvo momentos memorables, creo que lo más importante y lo que me cambió la vida fue al inicio. No conocía a nadie, era un lugar lleno de muchas culturas, muchas experiencias que me intimidaban y pues allí comprendí que el mundo era más grande de lo que pensaba.

Tejidos de Dignidad. ¿Cuáles son las luchas actuales del pueblo Wayúu? ¿En qué se articulan con las de otros pueblos indígenas del continente?

Leiqui Uriana. El pueblo Wayúu tiene varias luchas, nos encontramos en un territorio lleno de explotación minera y con mucha escasez de agua. También nos enfrentamos a una gran homogenización de las culturas por lo que presentamos pérdida del idioma wayuunaiki y desconocimiento de las culturas por parte de muchos jóvenes.

Tejidos de Dignidad. ¿Cómo analizas las posibilidades y condiciones para que mujeres y hombres indígenas hagan cine en Venezuela? ¿Cuáles consideras obras importantes del cine venezolano en relación a los pueblos indígenas?

Nosotros como Red de Comunicaciones Wayúu promovemos la Escuela de Comunicaciones Wayuu «Jayariyu Farias Montiel». A través de este espacio que es un espacio autónomo y binacional hemos promovido que jóvenes Wayúu puedan acercarse a la realización del cine.

Luzbeidy Monterrosa es una jóven Wayúu que estuvo en el proceso de la Escuela de comunicaciones y es una de las jóvenes que ha retratado sus realidades en Venezuela, en cortos como “María” y el de “Karla” son ejemplos de eso:

Corto “María”:

María


Corto Karla, niña indígena:

Territorio es comunidad, lugar, hogar: Karla, niña indígena Wayuu


Tengo casi 15 años que no vivo en Venezuela, creo que las condiciones no están dadas para poder hacer cine debido a que las personas o las jóvenes allá tienen muchas otras necesidades que cubrir. Pesé a eso como Wayúu estamos en un territorio fronterizo y eso nos permite crear para contar nuestras historias y hacer memoria de lo que en este tiempo está sucediendo.

Con el tercer ciclo formativo de la escuela de comunicaciones Wayúu existen jóvenes Wayúuque se han estado acercando para formar parte de este proceso. Pero creo que se necesitan más acciones y apoyo para que el indígena en Venezuela pueda surgir.

Cuando yo inicié no se hablaba de cine indígena, no existían indígenas realizando. Sólo había películas hechas sobre las comunidades indígenas. En Venezuela, el que creo que sigue viviendo allá y sigue haciendo cine es Kuyujani un indígena Yekuana y por lo que le he escuchado ha sido muy difícil, ha podido seguir haciendo gracias a fondos internacionales

Tejidos de Dignidad. Tu mirada sobre el territorio es transfronteriza, precisamente porque tu pueblo considera a toda La Guajira un solo territorio, ¿existen actualmente políticas culturales en Venezuela y Colombia que respeten esta mirada? 

Leiqui Uriana. Pues desde el gobierno de Colombia se están dando acciones para realizar actividades transfronterizas, pero desconozco las políticas como tal, solo sé de acciones que se realizan a modo de una acción natural.

Tejidos de Dignidad. ¿Qué mensaje darías a otras mujeres indígenas, como mujer Wayúu y cineasta, para que se atrevan a construir caminos de creación que permitan resguardar la cultura y memoria de sus pueblos?

Leiqui Uriana. Les aconsejaría seguir siendo fiel a sus intenciones de querer contar historias del pueblo Wayúu, teniendo en cuenta el respeto y los permisos espirituales, eso hace que la película tenga autenticidad y mucha más fuerza para transmitir lo que quieren. También hacer cine indígena es una acción colectiva por lo que les propongo siempre contar con el acompañamiento, consejo y asesoría de las autoridades de cada territorio.

Wesiyuma Hernández: “Sin territorio nosotros como pueblo, culturalmente, desaparecemos”

Wesiyuma Hernández, hijo del pueblo Ye’kwana, es egresado de la Universidad Indígena de Venezuela y co-fundador de la Organización para la defensa de la vida y el Territorio Kuyunu, en el Alto Ventuari, estado Bolívar en Venezuela. El pueblo Ye’kwana hace vida en 6 afluentes del río Orinoco, Cunucununa, Padamo, Ereato, Ventuari, Paragua y Caura, […]

Wesiyuma Hernández, hijo del pueblo Ye’kwana, es egresado de la Universidad Indígena de Venezuela y co-fundador de la Organización para la defensa de la vida y el Territorio Kuyunu, en el Alto Ventuari, estado Bolívar en Venezuela.

El pueblo Ye’kwana hace vida en 6 afluentes del río Orinoco, Cunucununa, Padamo, Ereato, Ventuari, Paragua y Caura, por lo cual es un pueblo experto en la navegación de la cuenca alta y media del río Orinoco. La cosmovisión Ye’kwana considera a Wanadi como el creador del cosmos y de cada existencia presente en los tres planos del mismo.

Tejidos de Dignidad. Wesiyuma nos podrías compartir tu mirada sobre qué significa ser Ye`kwana.

Wesiyuma. Ye’kwana significa que el hombre es un ser humano con sabiduría, conocimiento, gente de diálogo, gente colectiva y humilde y eso somos nosotros. Ser Ye`kwana , así nos hizo el creador Wanadi, quien nos trajo a esta tierra para compartir, para vivir en la tierra, generar la familia y aquí estamos porque Wanadi nos trajo para vivir sobre la tierra, nos trajo con nuestra cultura, idioma, forma de vida, el creador Wanadi trajo a todos los seres humanos con su propia cultura. Vinimos de Wanadi quien creó tierra, árboles, todo lo que hay en la tierra.

Tejidos de Dignidad. ¿Cuál es la lucha del pueblo Ye´kwana hoy en día?

Wesiyuma. Nosotros en este momento lo que hemos vivido en el Alto Ventuari, territorio Kuyunu está bajo la amenaza de la intervención de la minería y eso nosotros no lo queremos, queremos que nuestra selva sea sana así como la dejo nuestro creador Wanadi, no queremos que alguien intervenga, destruya o contamine a nuestros ríos, que nosotros consumimos día a día.

Lo que a mi me preocupa como coordinador, como representante del pueblo Ye’kwana, es que en otros pueblos, en otros sectores donde han tenido esta situación, han perdido el sentido de ser Ye’kwana, han perdido el colectivismo indígena, no hay familia, han perdido los valores más grandes, la identidad, y por la minería se está desapareciendo cultura Ye’kwana en otros sectores y eso es lo que no queremos en el territorio Kuyunu del Alto Ventuari, queremos seguir protegiendo con el apoyo de nuestros compañeros, hermanos luchadores, gente que se han prestado también a defender el territorio.

La minería nos ha causado muchos problemas: división del pueblo, debilitamiento de las autoridades legítimas del pueblo, son problemas serios que están pasando en algunas comunidades de la Amazonia venezolana y es lo que nosotros no podemos permitir, que eso siga avanzando. Además de destruir nuestro territorio, están destruyendo los ríos, nuestra cultura, cosas que no están permitidas en nuestro territorio.

La lucha que tenemos nosotros los pueblos indígenas Ye’kwana es la defensa en nuestro territorio, porque es una de las plataformas que garantiza la vida del pueblo, sin territorio nosotros como pueblo, culturalmente desaparecemos porque nuestro principio está en la tierra, en territorio en la selva.

Tejidos de Dignidad. ¿Qué significa la selva para el pueblo Ye´kwana?

Wesiyuma. Para el yekwana la selva es la biblioteca viviente, todo lo que hay en la selva son libros: Los árboles, animales, aguas, piedras, montañas, cerros, son libros en donde el indígena Yekwana ha aprendido, ha generado los conocimientos, los ha memorizado y ha mantenido la memoria. Eso es sagrado. El indígena ha leído profundamente cada palo, cada árbol, cuál es medicina, cuál es para la construcción, para la artesanía, si esta agua es para consumo, si esa es medicinal, esos son libros sobre los que el indígena ha sabido hacer una lectura, de cada uno de los elementos que hay sobre la tierra, en la selva. Eso hay que recuperarlo, darlo a comprender a otros hermanos que no han sabido comprender lo que es la naturaleza, lo que es la selva. La selva amazónica es una diversidad, de plantas y animales. Los indígenas han definido conceptos para árboles, plantas y animales, cuáles son sagrados, cuáles son comestibles.

Tejidos de Dignidad. Si la selva es la gran biblioteca ¿que representan los abuelos?.

Wesiyuma. Nuestros abuelos, sabios y sabias son conocedores de la selva, son conocedores del medio ambiente, del agua, de todo. Los ancianos han sabido interpretar cada uno de los árboles, de allí han generado los conocimientos, de allí han mantenido en su memoria todo libro del árbol, libro de la piedra, de los animales, de los insectos, de las montañas. Esos conocimientos los ancianos los han pasado a los jóvenes a sus hijos para que esos conocimientos sigan presentes , estén en cada uno de los Ye’kwana, para que en el futuro el Ye’kwana pueda ver cuál es el árbol medicinal, el árbol para la artesanía, la piedra que cura el cuerpo, cuál es el animal prohibido, los lugares sagrados que hay que mantener sin intervenir. Esos conocimientos de los ancianos vienen de la selva.

Tejidos de Dignidad. Cuéntanos sobre tu experiencia en la Universidad Indígena de Venezuela, ¿cómo la conociste y con qué pueblos indígenas estuviste ahí compartiendo y aprendiendo?

Wesiyuma. Fui uno de los estudiantes que me incorporé el 13 de febrero del año 2003. Es una experiencia muy diferente de una educación desde una perspectiva indígena, desde la cultura y cosmovisión indígena. Esa experiencia me dejó un compromiso profundo con mi pueblo, me lo tomo muy seriamente. Estuve 12 años de presencia en la Universidad: 6 años estudié, terminé mi carrera, luego hice el servicio para fortalecer y acompañar a otros estudiantes. La experiencia de la Universidad era formar a los jóvenes indígenas para luego defender su territorio y sus derechos.

En mi tiempo estuvimos 12 pueblos indígenas: warao, kariña, pemón, sánema, yukpa, pumé, yekwana, wottuja, yanomami, enepa,kuiba, jivi.Tuvimos ese compartir entre distintas visiones culturales, eso nos marcó un camino para consolidar experiencias de defensa de nuestros pueblos, de recuperación de su historia, para defender el medio ambiente y el ecosistema. Gracias al hermano Korta que inició esa gran experiencia de formación intercultural.

Tejido de Dignidad. ¿Cuál sería tu mensaje para las personas no indígenas?

Wesiyuma. Yo creo que es bueno aprender del indígena, aprender sobre la vida y la diversidad de las culturas. Comprender sobre los equilibrios culturales, sobre las diferencias, a pesar de que somos otros grupos culturales finalmente también somos seres humanos. Yo creo que debe haber un respeto cultural, no debe existir la idea de que la cultura no indígena es superior, no, todos somos iguales, todos somos importantes. La cultura indígena tiene características diferentes a la cultura no indígena, entonces creo que debe haber esa comprensión.

De las culturas indígenas pueden aprender los idiomas, lo que es la cultura de cada pueblo. Nosotros, gracias a esta interculturalidad hemos aprendido del idioma castellano, para tener una relación de más comunicación y poder transmitir el sentimiento doloroso que tenemos en nuestro pueblo, transmitir lo que pasa en la cultura, todo lo que pasa en nuestra vida. No solamente nosotros estamos obligados a aprender castellano, creo que también es importante que los no indígenas tengan la oportunidad de aprender nuestros idiomas indígenas.

Kuyujani Saúl López: «La cultura Yekwana no ha sido suficientemente visibilizada o contada desde adentro»

Kuyujani Saúl López (Kuyu) pertenece al pueblo Yekwana, nació hace 38 años en la comunidad Santa María de Erebato, municipio sucre del estado Bolivar en Venezuela. Es comunicador social y cineasta, y se ha dedicado a usar las herramientas comunicacionales para visibilizar la cultura de los pueblos indígenas, sobre todo la Yekwana, desde el rescate de la oralidad, de los tiempos no lineales y la cosmogonía indígena. De esta forma, contribuye a resguardar los conocimientos y las memorias ancestrales. En esta entrevista nos comparte más a fondo su mirada y su trayectoria.

Tejidos de Dignidad. ¿Cómo te iniciaste en la realización cinematográfica? Cuéntanos sobre tu historia como cineasta indígena

Kuyujani López. Siempre tenía la curiosidad de aprender sobre las tecnologías de la comunicación e información, entonces estudié la carrera de la comunicación social, mención Audiovisual. Durante mi proceso de formación fui descubriendo la importancia y el poder de las herramientas de la comunicación, como vengo de una comunidad indígena con una cultura particular, con la otra mirada al mundo, con pensamiento colectivo. Me fui empoderando sobre el uso de estas tecnologías para hacer cine, como una herramienta de lucha, para preservación de las culturas indígenas, para resguardar los conocimientos y memorias ancestrales.

Como cineasta indígena me ha tocado reflexionar de manera profunda a través de experiencias del trabajo que he realizado, a veces he tenido que romper la estructura lineal que utiliza la cultura occidental para la producción audiovisual. La cultura indígena es oral, la oralidad es el soporte y el significado de la palabra, es así como hoy en día podemos conocer el cine indígena. Por medio de la reflexión he notado que es necesario construir la manera o forma para interpretar de la realidad indígena, la autorrepresentación comunitaria, sin perder la tradición de la comunicación oral.

También ha sido un poco difícil de conseguir recursos o financiamiento para adquirir los equipos de filmación y para los honorarios de quienes han trabajado en las producciones. Siempre he trabajo con bajos presupuestos, con equipos prestado, pero por eso no he dejado de seguir trabajando porque para mí lo más importantes es contar la historia, cultura, la lucha de las comunidades indígenas por el territorio. Gracias a Dios siempre han habido personas que han comprendido el objetivo de mi trabajo humilde y de alguna manera u otra han contribuido a la causa indígena.

Tejidos de Dignidad. ¿Cuáles son los trabajos que has realizado?

Kuyujani López. Durante mi carrera profesional como cineasta, he realizados varios cortometrajes documentales y animaciones:

  • Dijaawa Wotunnöi – Cuento Ancestral de Dijaawa, 2017 (Animación en 2 D).
  • MEDA´CHA – Primer Chaman Yekwana, 2021 (Animación Stop motion).
  • Los niños Yekwana filman su mundo, 2023 (Documental).

Tejidos de Dignidad. ¿Por qué es importante para ti difundir la cultura Yekwana? ¿Cuál es tu relación con la cosmogonía Yekwana?

Kuyujani López. La cultura Yekwana no ha sido suficientemente visibilizada o contada desde adentro, desde la visión propia del Yekwana, por tal razón he decido trabajar sobre el tema, contar, compartir los conocimientos ancestrales indígenas, en este caso la del Yekwana. Siento que las culturas indígenas amazónicas también tienen mucho que aportar a la sociedad occidental, desde la visión colectiva relacionada con la naturaleza para salvaguardar la madre tierra, ante el cambio climático que amenaza severamente nuestra vida, y las de nuestras futuras generaciones.

Tejidos de Dignidad. ¿Hasta dónde has llegado con tus producciones?

Kuyujani López. Tuve la oportunidad de estrenar los dos trabajos de animación en el “Foro Humbolt”, en el museo de Berlín de Alemania. Ese ha sido para mí un logro importante y un orgullo, mostrar mi cultura como indígena Yekwana ante otras culturas del mundo. También nuestro trabajo ha estado en varios festivales de cine nacionales e internacionales. Por supuesto, hemos tenido proyecciones en varias comunidades indígenas Yekwana, que para mí es sumamente vital, compartir y devolver ese trabajo colectivo a los que colaboraron durante la realización de la película.

Tejidos de Dignidad. Comentanos sobre Jüwai Meda´cha, el primer chaman Yekwana. ¿Por qué hacer un corto sobre esta historia? ¿Qué significado tiene para ti y para tu cultura?

Kuyujani López. Este es una producción reciente, yo diría muy colectiva, donde participaron muchas personas aportando un granito de arena en la realización, empezando desde los ancianos, comunidades, organizaciones y productora de cine. Decidí contar una parte de la historia sobre el chamanismo, con la finalidad de hacerse conocer por qué los Yekwana creen en creencia, es decir en los sueños, en los símbolos y señales. El trabajo también se hizo con el objetivo de generar debates, discusiones sobre la creencia versus la ciencia. Para mi este tema es muy importe que se cuente porque refleja la visión, la relación simetría, convivencia armónica y respeto que tiene la cultura Yekwana con la naturaleza y todos los que rodean la madrea tierra.

Tejidos de Dignidad. ¿Cuáles son tus proyectos a futuros?

Kuyujani López. Seguir trabajando en las producciones audiovisuales con las comunidades indígenas, sobre varios temas, empezando por el territorio, contaminación del agua, crisis que genera el cambio climático, preservación de la cultura, y otros. Buscar financiamientos para crear una escuela de cine para formar los niños indígenas sobre el uso crítico de las tecnologías de la comunicación e información y la realización audiovisual, que sean ellos mismos que cuenten sus historias y que le digan al mundo como quieren vivir con otras culturas del mundo de manera respetuosa.

Seguir apoyando por medio del cine, las luchas de las comunidades indígenas por su territorio.

Por último, me gustaría aprovechar esta oportunidad en decirle que si algunas organizaciones que quieran colaborar para este tipo de formación de los jóvenes indígenas como futuros etnocomunicadores, cineastas, orgullosos de ser siendo indígena Yekwana, serán bienvenidos para trabajo social.

Tejidos de Dignidad. ¿Qué mensaje podrías darles a los jóvenes indígenas sobre sobre la necesidad de preservación de la cultura de los pueblos indígenas?

Kuyujani López. Que estudien, que se preparen, que sean conscientes ante la realidad que estamos enfrentando como indígenas en este mundo y sociedad tan cambiante, que no se olviden de su origen, que trabajen o piensen de forma colectiva que es lo que nos caracteriza a las culturas indígenas. Que aprovechen sus capacidades a cualquier proyecto de vida que se propongan, que con mucha constancia y sobre todo con mucha humildad todo se logra y se puede llegar muy lejos siempre en la busca de bienestar para nuestras comunidades y pueblos indígenas.

kingdesi hlebo.mobi bangalore sex.com مقاطع سكس منقبات justporno.pro سكس مصرى وكلام يهيج سكس اغتصاب اخته felltube.com رقص شرموطة مصرية سكس وقت المغامرة esarabe.com المتناك mallika sherawat hot wapporno.info sunnyleon sex video xnxx of indian girls pornobanan.com bhotan افلام سكس زوجه الاب iwanktv.pro سكس نيك فى الحمام سكس ممثلات مصر cyberpornvideos.com قائمة مواقع سكس tits hits assoass.mobi pronhab سحاق غصب crazyporncomics.com سكس مرات اب xxx punjabi videos roxtube.mobi usexvedios.com cheating sex videos 3gpkings.info indinxnxx freeindianporn tryporn.net x9 video com mini girls hentai hentaieva.com ochiko terada افلام نيك سكس امهات coc2arab.com سكس عنيل المحله